El día de la boda de Paz & Martín fue un día muy intenso. Empezamos temprano en el registro civil de Boedo, donde hubo algunas anécdotas para recordar del funcionario del registro que quedarán sólo entre los que estuvimos allí presentes. Para luego ir hacia General Rodriguez, lugar en el que se llevó a cabo la ceremonia religiosa y la fiesta -la cual merece un párrafo aparte- hasta la noche.
La locura de la fiesta empezó desde temprano cuando tiraron a Martín a la pileta, en cuestión de minutos terminaron tirándose casi todos, festejando y refrescándose del calor de aquél día. Luego hubo una batalla campal de espuma y cuando pensé que ya no sería sorprendido, aparecieron con disfraces de animales. Para más tarde finalizar la fiesta sorprendiendo a los invitados con fuegos artificiales.